Filósofo corporativo

La Filosofía puede tener un papel en entornos empresariales y de organizaciones
La Filosofía puede tener un papel en entornos empresariales y de organizaciones

 

El enfoque de Lou Marinoff está plasmado en varios libros tienen un carácter divulgativo, singularmente el popularmente conocido Más Platón menos Prozac. Es interesante porque este filósofo dedica un libro dirigido los profesionales que quieran seguir su método donde da las claves más relevantes de su visión y diferentes técnicas. Se trata de la obra Philosophical Practice donde solo existe en versión inglesa. En ese libro se tratan diversos elementos tales cómo hacer asesoramiento filosófico individualmente o para grupos. Una de la partes de libro más interesantes es la dedicada a explicar por qué un filósofo puede ser útil a las empresas y a las organizaciones.

El empeño principal de Marinoff es concebir que la Filosofía es algo útil, necesario y orientado a la práctica. En esta línea, propone una serie de cuestiones donde la Filosofía tiene su lugar en el mundo de las corporaciones. Esto, además, está vinculado con un tema de moda como es el de la Responsabilidad Social de las Empresas o la intersección entre ética y negocios.

La visión que se desarrolla en Philosophical Practice sobre este tema están incluida en un capítulo titulado Corporate Philosopher. Una de las funciones del filósofo en el mundo de las Organizaciones y las Empresas se vincula con los valores y los objetivos. De esta forma, Marinoff afirma que toda organización tiene una misión, un propósito. Mientras que la aserción desnuda de que el objetivo de una empresa es maximizar el beneficio es tautológica y empobrecedora. El objetivo o misión de las empresas no se completan en hacer dinero, sino cuando contribuyen a la seguridad, prosperidad, oportunidad e integridad de sus empleados, sus clientes y sus comunidades.

En este blog, se ha dedicado un post al Modelo ético virtuoso. Es interesante porque Marinoff asocia la función del asesoramiento filosófico con los comportamientos virtuosos de los individuos y las organizaciones. Desde esta visión, este autor afirma que “desde mi perspectiva, la premisa particular sobre la que descansa el asesoramiento filosófico reposa una simple noción en la que se basa cualquier sociedad civilizada: los individuos virtuosos son más deseables y más funcionales que los viciosos como miembros de la comunidad. De forma similar, la organizaciones más virtuosas son más deseables y más funcionales que las viciosas como miembros de la sociedad”.

La apuesta de Marinoff es aportar elementos de método donde el enfoque filosófico pueda ser relevante en la gestión del conflicto en ámbitos profesionales. Realiza una serie de reflexiones sobre fondo y forma a transcendencia filosófica. Desde esta perspectiva, Marinoff afirma que “la sustancia filosófica es infinitamente diversificable, aplicable de forma ubicua, y completamente inagotable. Ya sea lo que interesa a los empleados y su organizaciones, esto puede ser examinado y reevaluado filosóficamente.” Una de las características de la Filosofía es la capacidad de análisis y la de aprender a través de buenas preguntas.

A continuación, se analizarán diversas técnicas del Filósofo corporativo: a) Discurso motivacional; b) Creación de códigos éticos; c) Auto-defensa moral; d) Entrenamiento en dilemas.

Discurso motivacional:

Una de las funciones de la Filosofía en las Organizaciones es como forma de potenciar la motivación, especialmente a través de discursos en eventos señalados o pequeños Workshops. De esta forma, los Filósofos corporativos cumplirían un rol como una especie de entrenadores de atletismo, donde se aunarían una figura paternal, en parte líder, en parte confesor, en parte filósofo, en parte psicólogo, en parte innovador y completamente un motivador para conseguir los objetivos propuestos.

El Filósofo corporativo sería un experto en asesoramiento motivacional. Esto está bastante de moda y se conoce como coaching. Lo que distingue al Filósofo son las herramientas y el background que utiliza. Un ejemplo sería ser orador motivacional en un evento corporativo, motivando, persuadiendo con razones sólidas, infundiendo entusiasmo contagioso, galvanizando con energía retorica, utilizando un carisma fuerte.

Creación de Códigos éticos:

Otro ámbito donde los Filósofos tiene un papel destacado en el mundo empresarial y de las organización es la Deontología profesional y la plasmación de sus valores en Códigos éticos. A este respecto, Marinoff sostiene que “mientras cualquier persona inteligente puede formar un código de ética, no cada persona inteligente puede implementarlo en un lugar de trabajo.”

Lo que pone en cuestión es la distancia que, a veces, se produce entre la teoría y la práctica de la ética profesional y precisamente lo que defiende es que la práctica desde ser un ejercicio de prudencia. De esta forma, Marinoff, sostiene que “el arte de la efectiva implementación en sí misma descansa en una metodología confiable – que en este contexto es una manifestación de la phronesis– que es precisamente que los filósofos prácticos pueden ofrecer.” Otro elemento relevante donde los filósofos tienen un papel es el cumplimiento ético donde a través de Comités de Ética o similares se establece algún tipo de sanción al incumplimiento de las normas deontológicas.

Auto-defensa moral:

En los puestos de trabajo conviven personas de diferencias en sexo, religión o convicciones, origen racial o étnico, capacidad-discapacidad, orientación sexual…

En ocasiones, se dan conflictos laborales debidos a estas características y una función de los filósofos es facilitar la gestión de estos conflictos. Una forma es impartir seminarios para sensibilizar en determinadas problemáticas. Habitualmente lo políticamente correcto es sensibilizarse por estas cuestiones. Sin embargo, el enfoque de Marinoff es precisamente que, ante estas cuestiones, se debe ser insensible como una mejor solución al conflicto.

Entrenamiento en dilemas:

La técnica de los dilemas sirve para plantear cuestiones donde se dan situaciones con intereses contrapuestos. Marinoff habla de conflictos entre moralidad privada y ética profesional, entre honestidad o complicidad con delitos de cuello blanco o situaciones donde se trata de hacer el trabajo de forma íntegra frente a otras posibilidades.

Por ultimo, el filósofo corporativo tiene un gran papel en el fomento y desarrollo del liderazgo y la buena gobernanza. Se trata de desarrollar una cultura de valores positivos que potencien a personas con iniciativa y visión de futuro

Construyendo tu casa filosófica

La Filosofia puede ser útil en las grandes cuestiones de la vida
La Filosofia puede ser útil en las grandes cuestiones de la vida

 

Después de Más Platón y menos Prozac, Lou Marinoff escribió una obra que en la versión española se llamó Pregúntale a Platón y en la versión inglesa Big questions. How Philosophy can change your life. Allí el filósofo estadounidense desarrolla su enfoque sobre diversos temas polémicos de una forma iconoclasta y, en ocasiones, crítica con lo políticamente correcto. Así nos habla sobre razón o pasión, sufrimiento, amor, guerra de sexos, tecnología, espiritualidad, cambios… Realiza planteamientos originales y apela a diversas filosofías vitales. En el inicio de la obra, Marinoff expone ocho formas que la filosofía puede cambiar tu vida. Estas serían: Curando, Floreciendo, Consiguiendo, Despertando, Administrando, Purificando, Siendo.

Uno de los capítulos más interesantes del libro es en el que expone el Método MEANS, que es el acrónimo en inglés de Momentos de verdad, Expectativas, Apegos, Emociones negativas y Elecciones sagaces. Este método busca construir una casa filosófica donde llevar a cabo los planes de vida. Como afirma Marinoff, no es el proyecto de un día, construir la casa supone mucho tiempo y esfuerzo. A continuación se analizarán los elementos del Método MEANS.

Momentos de verdad:

El primer elemento son situaciones difíciles que nos llenan de preguntas y donde la salida no es sencilla. Como afirma Marinoff, todos experimentamos momentos de verdad en nuestras vidas: esto es, tiempos donde somos severamente puestos a prueba por las circunstancias. Se trata de situaciones como accidentes, daños, enfermedades, la pérdida de un ser querido, la ruptura de un matrimonio o un repentino cambio de carrera. O cualquier situación catárquica similar que no tiene una solución inmediata y de la que no hay refugio aparente.

Desde este perspectiva, Marinoff sostiene que éstas son las mayores oportunidades de para hacer grandes avances en crecimiento personal. Estos momentos son incluso más significativos por la verdad que revelan que por el sufrimiento que comportan. Cuando las cosas van mal la gente de repente esta llena de preguntas sobre sus circunstancias. Nadie cuestiona los buenos tiempos, en los malos tiempos de repente todo el mundo es filósofo. De esta forma, Marinoff afirma que como los malos tiempos son inevitables. Es mejor si tienes una filosofía de vida preparada y a la espera.

Expectativas:

En el enfoque de Marinoff se centra en las fuentes de malestar y una de las mayores de estas fuentes son las expectativas. De esta forma, el autor afirma que todos tenemos expectativas. Sobre uno, sobre los demás, sobre las cosas en particular o el mundo en general. Cuanta más expectativas tengas, más interferirán en una filosofía de vida constructiva.

De hecho, se podría decir que gran parte de lo que compone la felicidad o infelicidad se basa en las expectativas anteriores. En este contexto, Marinoff se pregunta “si tus expectativas era irreales, ¿por qué mantenerlas? Si eran realistas, ¿por qué no cumplirlas?”. El mejor consejo es tener unas expectativas que prevean el peor escenario posible, pero también estar preparado para gestionar si se cumplen las mejores expectativas.

Apegos:

El siguiente punto de atención de Marinoff son los apegos –attachments-. De esta forma, afirma que todos tenemos apegos, ya sea beneficiosos o negativos. Estos pueden ser gustos o aversiones. Los gustos se puede convertir en obsesiones y las aversiones se puede convertir en prejuicios. La forma de concebir tus apegos son causas primarias de tu malestar. La cuestión es qué nos domina y cuáles son las cosas y emociones vinculadas que, en ocasiones, hacen que no tomemos una decisión libre y con la información adecuada.

Es interesante que Marinoff profundice en el tema de que tenemos apegos a las memorias y recuerdos. De esta forma, tu identidad es la suma total de tus memorias. Pero un actitud crítica y abierta al cambio también es algo positivo y puede ser una fuente de bienestar.

Emociones negativas:

La emociones son un elemento relevante a tener en cuenta en la vida. Con el amor, la empatía o la compasión se pueden formar familias o sociedades. En cambio, las emociones negativas como el odio, la hostilidad o el resentimiento también pueden ser poderosas. Marinoff recomienda transformar la energía negativa en energía neutral o positiva.

La energía neutral es una actividad o diversión que permite disipar las malas hondas sin hacer daño a nadie. Por ejemplo, el ejercicio físico, diversos juegos o hobbies. Pero es mejor si se transforma la energía negativa en energía positiva. La clave estaría en evitar dañar a otros mostrando energía positiva y constructiva pudiendo, de hecho, ayudar a los demás.

Elecciones sagaces:

Construir una casa filosófica supone tener una filosofía de vida que puede ayudarnos a tomar las decisiones más difíciles. Como afirma Marinoff nunca podemos garantizar que hacemos el mejor movimiento, Nuestro reto más grande: hacer las mejores opciones como opuestas a las peores. En este contexto, la regla sería mejorar el bienestar y reducir el malestar. En este sentido, Marinoff afirma que “sé sabio o tonto como prefieras y transforma tu vida de acuerdo con eso”.

La clave de una buena Filosofía de vida es cómo gestionar los cambios y conservar el bienestar. Se debe desarrollar la energía positiva en todos los ámbitos y poder transformar, de forma adecuada, la negativa. Marinoff sostiene que tu Filosofía de vida te inclina hacia transformaciones positivas, que te llevará jubiloso por los buenos tiempos y nunca lejos de la comodidad, incluso en los malos tiempos.

 

Asesoramiento filosófico en acción

El empeño de Marinoff es convertir la Filosofia en un enfoque aplicado, útil y orientado a la práctica
El empeño de Marinoff es convertir la Filosofia en un enfoque aplicado, útil y orientado a la práctica

 

En la obra Mas Platón y menos Prozac, Lou Marinoff propone un método para analizar problemas que es la base del asesoramiento filosófico que defiende que es una forma útil de resolver situaciones de la vida cotidiana. Su empeño es convertir la Filosofía en una disciplina aplicada y el enfoque filosófico en un enfoque práctico, útil y necesario para orientar a los seres humanos en los dilemas del mundo moral.

Desde esta perspectiva, Marinoff presenta en un capítulo de esta obra titulado el proceso PEACE: cinco pasos para enfrentarse a los problemas con Filosofía. Este es un método para utilizar la Filosofía práctica y enfocar con éxito diversas situaciones. Lo primero que dice el autor es que “el asesoramiento filosófico es más un arte que una ciencia y siempre es diferente con cada individuo.”

Se llama proceso PEACE porque es un acrónimo cinco etapas: Problema, Emoción, Análisis, Contemplación y Equilibrio. Todas estas etapas son relevantes a la hora de afrontar y resolver un tema que cree preocupación. Se trata de seguir estas etapas con el orden propuesto. A continuación, se ofrecerá un análisis de cada una de estas etapas:

Problema: La primera tarea es identificar el problema. Esto en ocasiones, es fácil o puede ser más difícil. Si alguien ha perdido recientemente a un ser querido es fácil identificar que esto será motivo de su tristeza. Sin embargo, otra veces, alguien puede afirmar no conocer el motivo de su dolor. O mejor expresado, el motivo esté oculto en una maraña de diversas experiencias vitales y creencias arraigadas.

Identificar bien el problema también permite delimitar cuándo se trata de un tema que resuelve la Psicología y cuándo se trata de una cuestión eminentemente filosófica. La Filosofía intenta dar respuesta a las grandes cuestiones de la vida y, en muchas ocasiones, formula nuevas preguntas. Recordando el método socrático de siempre formular preguntar que despertaran las ideas y partir del conocido “sólo sé que no sé nada”. Y, a partir de aquí, querer aprender en un diálogo enriquecedor.

Emoción: La segunda etapa consiste en hacer acopio de las emociones que le provoca el problema. Los temas suelen llevar implicados componentes emocionales implícitos o explícitos que pueden facilitar o entorpecer el normal curso de los acontecimientos. En otro post, me he ocupado de las emociones en la negociación donde éstas tienen un papel que debe ser tenido en cuenta para conseguir el éxito pretendido.

El consejo que ofrece Marinoff consiste en sostener que “debe experimentar emociones genuinas y canalizarlas de forma constructiva.” Al afrontar un tema deben aflorar la diversas emociones y comprobar su influencia en nuestra perspectiva. Es relevante saber distanciarse del sesgo emocional sobre personas y valores para poder tomar decisiones adecuadas.

Análisis: En la tercera etapa, usted enumera y examina las opciones para resolver el problema. Se trata de analizar todas las posibilidades y, en ocasiones, usando la imaginación. En otro post, me referí a Inventar opciones para beneficio mutuo para las situaciones donde desde la creatividad se pueden sugerir nuevas opciones en el curso de las negociaciones.

En esta etapa de análisis, las diversas filosofías o los fragmentos de la Historia de las Ideas o el método filosófico sirven de adecuado marco desde el que examinar los diversos temas. La Filosofía es necesaria e útil, para entender el mundo que nos rodea. En este sentido, Marinoff sostiene que “la solución ideal sería que normalizara tanto los aspectos externos (el problema) como los internos (las emociones que ha despertado el problema), pero la solución final no siempre está a su alcance.”

Una vida no examinada no merece ser vivida, decía Sócrates. El examen filosófico de la vida nos debe ayudar a vivir mejor. Ese es el origen de toda ética, aprender a vivir bien.

Equilibrio: En la siguiente etapa, usted da un paso atrás, gana cierta perspectiva y contempla la situación en su conjunto. Esta es un etapa de contemplación holista de los pros y los contra, de los argumentos a favor y en contra de cada posición. Se trataría de, si se trata de un dilema, cuál de las dos salidas pesa menos o tiene menos costes. Esa es una forma de análisis, pero los dilemas son tales porque cualquiera que sea su salida provoca remordimiento.

La vida es más compleja, plural rica en matices y no puede ser analizada a partir de una única variable, en forma de análisis coste-beneficio. Sí es posible intentar pasar de los detalles de lo particular a lo general y tratar de encontrar un equilibrio a partir de un marco analítico que haya sido proveído desde bases filosóficas.

En la Historia de las Ideas, existen visiones más próximas a la armonía de los valores y otras al conflicto o pluralismo de valores. Hay filosofías que afirman que para cada problema existe una única solución o filosofías que afirman que nuestro mundo moral nos aboca a decisiones trágicas entre soluciones inconmensurables. Depende como se conciban los valores y las capacidades de los seres humanos de llegar a conocerlos. Ese es el camino que siguen las diversas filosofías.

La última fase del asesoramiento filosófico supone hacer un balance enriquecedor de lo que la Filosofía ha aportado en su enfoque de los problemas. Como sostiene Marinoff, después de enunciar el problema, expresar sus emociones, analizar sus opciones y contemplar la situación desde una postura filosófica, alcanzará el equilibrio. Esa es la forma de entender la esencia de su problema y estará preparado para emprender actos adecuados y justificables. Esta es la forma habitual del enfoque conocido como práctica filosófica.